Elefsina, Timisoara y Veszprém
Arte y cultura en 2023
El título de Capital Europea de la Cultura se remonta a 1985. Melina Mercouri y Jack Lang, ministros de Cultura de Grecia y Francia, respectivamente, tuvieron la idea de elegir una vez al año la Capital Europea de la Cultura, con la intención de conectar a los pueblos de Europa y concienciarlos sobre su historia y valores compartidos. Ese mismo año, la resolución de los ministros de Cultura de la Unión Europea puso en marcha el proyecto. La iniciativa se convirtió pronto en uno de los acontecimientos europeos más prestigiosos. Desde entonces, más de cuarenta ciudades han ostentado el título de Capital Europea de la Cultura (CEC). Cada año, las ciudades seleccionadas son un ejemplo de la riqueza y diversidad de las culturas europeas.
El 23 de diciembre de 2020, la Comisión Europea tomó la decisión oficial de aplazar la capitalidad europea en 2021 al año 2022, a causa de la crisis mundial provocada por la pandemia de la COVID-19. De esta forma, Novi Sad (Serbia) se unía a Kaunas (Lituania) y Esch-sur-Alzette (Luxemburgo) como Capitales Europeas de la Cultura en 2022, mientras que Timisoara (Rumanía) no ostentaría el título hasta 2023 junto con Elefsina (Grecia) y Veszprém (Hungría).
La CEP se creó para poner de relieve la riqueza y diversidad de las culturas europeas, reforzar los lazos entre los ciudadanos de Europa, conectar a personas de distintos países europeos, conocer otras culturas, promover el entendimiento mutuo y fortalecer el sentimiento de europeidad. El legado más importante del proyecto es situar la cultura en el centro mismo del desarrollo social y redefinir la cultura como un elemento fundamental del desarrollo económico basado en el conocimiento, la innovación y la creatividad.
Muchas capitales de la cultura aprovecharon esta oportunidad para desarrollar infraestructuras culturales durante y después del proyecto, proporcionar un acceso más amplio a la cultura, mejorar la imagen de la ciudad, desarrollar la economía del turismo y reforzar las industrias culturales y creativas.
©Csák István
© Cornel Putan
Elefsina CEC2023 está llevando a cabo acciones en apoyo de un legado tangible e intangible que garantice la continuidad cultural y la singularidad de la ciudad como referencia en la historia griega antigua y moderna. Por ejemplo, se está adaptando y reutilizando determinados edificios industriales abandonados. Esta reconversión proporcionará espacios para la promoción de la cultura actual, es decir, intervenciones artísticas y performativas continuas en la vida de la ciudad. Elefsina está remodelando y transformando un emplazamiento industrial degradado medioambientalmente, en una zona que ahora se conoce como Dogteeth, para crear un teatro paisajístico.
Elefsina también está aprovechando la capitalidad cultural para mejorar la movilidad entre la ciudad y el área metropolitana de Atenas. Por razones tanto prácticas como turísticas, se ha creado una ruta de transporte marítimo, que así estimula la naturaleza costera de Elefsina. Además, se ha impulsado la reactivación de las líneas de transporte ferroviario existentes, como el tren histórico que antaño conducía a Elefsina.
Timisoara empezó 2023 estableciéndose como un lugar donde la excelencia cultural proporciona a sus ciudadanos confianza en sí mismos y el poder de provocar cambios mediante la participación y la implicación. Habida cuenta de su papel como iniciadora de transformaciones en momentos cruciales de la historia, Timisoara utiliza su capitalidad cultural para restaurar la capacidad de los ciudadanos de promover cambios y contribuir a una Europa revitalizada, poniendo en marcha la energía cívica. Partiendo de la vívida y poderosa metáfora de la luz, Timisoara utiliza el lema «Brilla con tu luz, ¡ilumina tu ciudad!».
El desarrollo de las infraestructuras de la CEC2023 se centra en proyectos al servicio de los programas culturales y comunitarios, con una atención especial a la revitalización y reinterpretación del patrimonio de edificios y espacios públicos de la ciudad y la región ya existentes, en desuso e infrautilizados.
La ciudad de Veszprém ha definido el distrito cultural y el sistema de espacios públicos que une el Teatro Petőfi, la Biblioteca Municipal Eötvös Károly, el Museo Laczkó Dezső, el Hangvilla, la Escuela de Música Csermák Antal y la Universidad de Panonia. El Jardín del Obispo, el Parque Erzsébet y el paseo Erzsébet, situados en el centro de Veszprém, constituyen una activa zona ajardinada contigua de cuatro hectáreas. La zona de la antigua colina de San Nicolás se convertirá en uno de los subcentros de las actuales instalaciones culturales, educativas y musicales de la ciudad.
Veszprém está llevando a cabo intervenciones en lugares específicos (tanto arquitectónicos como urbanos) para cambiar la imagen a la ciudad. Por ejemplo, la zona del campus de la calle de la Universidad de Panonia está actualmente separada del sistema de espacios públicos por vallas y barreras de tráfico cerca del parque y el paseo Elizabeth. Los espacios situados entre los edificios centrales de la universidad suelen utilizarse como aparcamientos. CEC2023 está aportando a la ciudad una nueva red de espacios públicos abiertos.
© Haris Andronos